domingo, 21 de agosto de 2011

"¿Qué no piensas como yo? Pues te mato"

Ese es el germen de la guerra.
 Cualquier guerra.
 Y siempre la pagan los "inocentes".
Inocentes entre comillas porque, como dice Unamuno en "En torno al casticismo"...
  "su labor es útil, pero no por ellos ni para ellos, sino a su pesar; su labor es útil para los que se aprovechan con otro espíritu" (p.45, un gran libro)


Todos somos útiles, pero porque nos dejamos utilizar.

1 comentario:

  1. Esto me recuerda a una exposición de fotografía sobre las guerras árabes que he visto hoy. Creo que te habría gustado...
    besitos

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